lunes, 27 de septiembre de 2010

El auténtico escollo


En las últimas semanas ETA nos ha perpetrado tres comunicados, tres ya, en los que el contenido de interés, si existe, se encuentra en dosis homeopáticas, indetectables para el ser humano normal.

Este goteo de textos triunfales pero sin apenas contenido tiene que ver con que, asumida su derrota policial, ETA necesita, o al menos pretende, tutelar las consecuencias de su desaparición.

Nadie duda de que el fin del terrorismo está cerca y que traerá consecuencias. La mayoría serán muy positivas para el conjunto de la sociedad vasca pero sin duda también las habrá, y sin duda serán perturbadoras, en el seno de las distintas sensibilidades y opciones del nacionalismo. Esa tormenta política es lo que ETA va a intentar mediatizar y cada comunicado es una borrasca que busca producir movimientos en ese entorno.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Mejor sin anuncios o "La momia de Tutankhamon"


En España tenemos una cierta tendencia a pensar que a partir de cierto tamaño las entidades se mantienen por sí mismas, que nada puede hacerlas desaparecer y que, por tanto, todo esfuerzo que se haga para su sostenimiento es una pérdida absurda de tiempo y de dinero, eso cuando no un engaño urdido por taimados individuos o grupos para “sangrarnos”. Algo de esto sabe la iglesia católica que lleva décadas comprobando, primero asombrada y más tarde resignada, la tacañería de los fieles de la catolicísima España.

Evidentemente tamaña estupidez no se sostiene ni de lejos. Las cosas existen, las buenas y las malas, porque alguien, tal vez usted mismo, decide asignarles dinero, recursos o ambas cosas.
Desde hace meses Televisión Española ha dejado de emitir publicidad. El resultado inmediato ha sido un remonte en las audiencias de la cadena, tan alentador como inútil desde el punto de vista de los ingresos. Es claro, las buenas audiencias agradan pero de poco sirven si ya no pueden “venderse” a quienes las compraban: los anunciantes, cuyo dinero permitía mantener la cadena y adquirir o producir nuevos programas.

La simple e indiscutible admonición “mejor sin anuncios”, parece que fue argumento suficiente para retirar la publicidad de TVE. Suficiente y popular lo ha sido -sin duda- pero razonable ya no estoy tan seguro. Las nuevas fórmulas de financiación de TVE: 547 millones de euros de presupuesto público, un canon a pagar por las teles privadas (90 millones ) y otro por los operadores de telecomunicaciones (220 millones)se han mostrado, de momento, insuficientes para sostener la televisión pública, de entrada porque nos son fáciles de cobrar pero es que, además, las autoridades de la competencia de la Unión Europea están revisando con lupa la idoneidad de este nuevo sistema y parece que pintan bastos.

Esto lo digo sin contar con que en un momento de necesidad de impulsar el consumo se cerró sin titubeos una de las ventanas más importantes de la publicidad, puede que bajo la percepción de que “a la publicidad nadie le hace caso”, idea errónea sobre la que ya me he pronunciado previamente en este blog y sobre la que me da mucha pereza volver.

La televisión es un medio que precisa de audiencias importantes. Solo ellas justifican las grandes inversiones que el medio necesita. Expulsar a la pública del mercado es privarla del feedback que necesita para mantenerse viva en el pelotón de cabeza del mundo audiovisual. Es evidente que las cosas no se desploman de hoy para mañana y que la inercia tiene su papel pero también lo es que un medio tan caro no puede mantenerse en precario, a la espera de saber si su financiación va a llegar o no y cuándo lo hará.

El sarcófago de Tutankhamon mantuvo impecablemente su momia durante miles de años pero en realidad el faraón estaba muerto desde el año en que cumplió 18. Me gustaría que tal cosa no le sucediese a ninguna televisión pública.

Seguiremos informando…

martes, 21 de septiembre de 2010

No defraudar


Los compañeros del Grupo Parlamentario me ponen en un aprieto. En el último número del boletín que edita el grupo hacen referencia a los parlamentarios socialistas que tenemos bitácoras personales como ésta. Y de la mía dicen nada menos que “Carlos Gorostiza con una pizca de ironía, otra de sentido del humor y un toque de realismo nos presenta su punto de vista de la actualidad”.
Me alegra que los más cercanos me estimen pero también me condena a partir de ahora a no defraudar y a seguir alimentando este blog con esos tres ingredientes tan esquivos: La ironía, el humor y el realismo”. A ver si soy capaz.
Además de mi humilde blog hacen referencia también al de Oscar Rodriguez, que es incansable (no como yo), al de Txarli Prieto, increíble alquimista de fogones, al intimísimo blog de Aitor Casado y al del Lehendakari, que no ha perdido ni una pizca de su tono cercano y personal pese a que su autor se mudase hace año y medio a Ajuria Enea.
En fin, como este blog no se creó para nada que no fuera ejercitar un poco el pensamiento y la reflexión, me tomaré este pequeño reconocimiento como un “akullu” para no confundir la serenidad y la calma con sus hermanas la pereza y la molicie. Tendré que darles las gracias.