sábado, 25 de junio de 2011

Oro Sagrado



Posiblemente atraído por el brillo del oro me fui al Museo de Bellas Artes de Bilbao y me encontré con una exposición en la que el dorado y adorado metal era lo de menos.

La exposición “Oro sagrado. Arte prehispánico en Colombia” es una muestra no solo de una asombrosa destreza en el trabajo metalúrgico sino sobre todo de una forma de entender el arte que me pareció extrañamente moderna aunque las piezas tengan entre 500 y 2000 años.



Por supuesto no puede evitar pensar en cuántas maravillas como esas terminaron fundidas y, por consiguiente, perdidas para siempre.

viernes, 24 de junio de 2011

Sin interés informativo

Viñeta de Carlos Azagra

Ayer el Parlamento Vasco aprobó una “Declaración Institucional” en defensa de la importancia del periodismo como herramienta básica de la libertad de expresión y de la misma democracia. La declaración se hizo coincidiendo con la decisión del cierre de las delegaciones de Antena 3 y Tele 5 en Vitoria. Cierres que se suman a los muchos recortes de plantilla que están haciendo otras empresas periodísticas.

Que los políticos expresemos nuestra solidaridad con los periodistas que nos vigilan y que lo expresemos, además, con una declaración solemne y unánime de todos los parlamentarios debería hacer pensar que tal vez entre nosotros haya más partidarios de la transparencia de los que se suele creer.

En todo caso llama la atención que de todos los muchos ERES y despidos colectivos que esta crisis está generando, de los únicos que no se informa nunca o casi nunca es –qué casualidad- de los que hacen los periódicos, emisoras y grupos de comunicación con sus trabajadores.

De hecho una de las cosas menos conocidas por la opinión pública son las condiciones laborales leoninas que, desde hace muchos años, son moneda corriente en las redacciones de los mismos medios que le informan de otros conflictos laborales, pero nunca de los suyos mismos. Será que no tienen interés informativo.

Declaración Institucional del Parlamento Vasco

El Parlamento Vasco muestra su respaldo a la labor que desempeñan los profesionales de los distintos medios de comunicación como garantía de pluralidad y expresa su preocupación por el cierre de las corresponsalías de Telecinco y Antena 3 en Vitoria-Gasteiz, con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo y de oportunidades de seguimiento de la actividad de las instituciones centrales de Euskadi que tienen su sede en esta ciudad.

El Parlamento considera necesario que los medios desempeñen la función de crítica a los poderes públicos, y entiende que la garantía del derecho a la información pasa por que las propias empresas periodísticas, incluso siendo privadas, sean conscientes de que cumplen una función pública. Por ello, los grupos parlamentarios apelamos a esas empresas, para que ejerzan su responsabilidad y garanticen unas condiciones laborales dignas que permitan a sus profesionales ser totalmente libres en el ejercicio de sus tareas informativas y, con su libertad, garanticen la pluralidad e incrementen la libertad de todos los ciudadanos.

En este sentido, el Parlamento Vasco se reitera en el acuerdo del 9 de junio de 2010 e insiste en expresar su “preocupación por la creciente precarización y deterioro de las condiciones laborales y profesionales del periodismo en Euskadi, que pueden afectar a la calidad de la información, poniendo en riesgo el derecho de los ciudadanos a recibir una información veraz y plural y, en última instancia, haciendo perder a los medios de comunicación su función de control social que resulta imprescindible en toda sociedad democrática”.

Los parlamentarios y parlamentarias vascos deseamos seguir contando en estos pasillos con la presencia, a veces incómoda pero siempre necesaria, de periodistas de los medios más diversos que pregunten sobre lo que consideren que puede ser de interés para los ciudadanos, de cámaras y fotógrafos que traduzcan a imágenes el instante político que vivimos y entendemos que el cierre de corresponsalías es una mala noticia para toda la sociedad vasca.

El Parlamento trasladará esta declaración institucional a las empresas periodísticas y a las asociaciones que velan por las garantías del derecho a la información a fin de que sean conocedores de la preocupación de los representantes de los ciudadanos de la Comunidad Autónoma Vasca en torno a lo que está ocurriendo en uno de los pilares básicos de un sistema democrático que aspira a ser lo más abierto y plural posible".

Vitoria-Gasteiz, 23 de junio del 2011

martes, 21 de junio de 2011

La mala resaca del terrorismo

Infierno. Hieronymus Bosch (El Bosco)

No deja de ser chocante que la Guardia Civil, las policías española y francesa y la Ertzaintza se hayan convertido en las principales aliadas de una izquierda abertzale que ahora puede adoptar posiciones políticas que le hubiesen costado muy caras en otros tiempos. Yoyes y algunos otros no tuvieron esa suerte.

La enorme debilidad a la que el trabajo policial ha llevado a ETA no solo ha aliviado la presión sobre dirigentes y votantes abertzales sino que, además –y también es paradoja- les está eximiendo de tener que pronunciarse contra lo que antes llamaban “la vanguardia”. Al fin y al cabo ETA está a punto de desaparecer sin necesidad de que ellos tengan que mover un dedo que alguien les podría en su día reprochar ¿Por qué iban a hacerlo entonces?

Pero tres décadas de asesinatos, amenazas, coacciones y enorme violencia contra la sociedad vasca no van a pasar sin más. La borrachera de sangre y de terror no se evaporará sin una resaca proporcional a la intoxicación a la que se nos ha sometido.

Maite Pagazaurtundua piensa que existe un síndrome de Estocolmo colectivo, y puede que tenga algo de razón. Andoni Ortúzar dice desear que nos olvidemos del terrorismo y que “nos dejen en paz” y muchos desean que así sea, que nos olvidemos de todo y que pasemos página, muy especialmente los que, como el PNV estuvieron, salvo poquísimas excepciones, siempre en el lado bueno de las pistolas.

Pero Euskadi es una sociedad herida, lesionada dije un día, y no va a librarse tan fácilmente de sus fantasmas. Suponiendo que se haya acabado ya el veneno, aún tendremos que pasar por un proceso de desintoxicación que abarcará a todos, aunque a unos más que a otros y a la izquierda abertzale sin duda a la que más.

El Lehendakari ha dicho que no se puede cerrar el libro de la violencia sin leer la última página, esa que precisamente no quieren leer los abertzales porque temen, con razón, que les amargue su última victoria.

Verdad, para no olvidar lo ocurrido, justicia, para reparar el daño causado y democracia, sobre la que construir una convivencia en libertad. Esos son los tres únicos ingredientes que nos ayudarán a superar la embriaguez del terror. Cuanto antes empecemos mejor.

jueves, 16 de junio de 2011

Por cuatro que la lían

“Somos 3.000 y por cuatro que la lían nos acusarán a todos de violentos”. Así describe hoy el diario Público la desazón y el enfado con que Xabi se dirigía a Marc, ambos en medio de las concentraciones que rodeaban el Parlamento de Cataluña.

Yo me he sentido muy identificado con ese tal Xavi, que ayer descubrió dentro de sí mismo el sentimiento de injusticia y de desánimo que tenemos muchos que, por dedicarnos a la política somos tratados de ladrones, corruptos y vagos porque algunos de nosotros sí lo sean. Una acusación ésta profundamente injusta que, sin embargo, ha sido alegremente lanzada en las mismas concentraciones y acampadas de los indignados.

Xavi y Marc vieron ayer lo fácil que es ser víctima de la maledicencia y de la injusticia que vienen de la mano de la generalización, sea estúpida o interesada.

Ni son cuatro los políticos corruptos ni fueron cuatro los que agredían ayer a los diputados electos catalanes, pero Xavi tiene razón en indignarse. Yo le entiendo mejor que nadie, lo mismo que el resto de los miles de políticos honrados que llevamos años soportando lo que él descubrió ayer.

martes, 14 de junio de 2011

Televisión para quienes no ven la televisión

Hoy ha pasado una cosa muy importante. Se ha presentado EiTB a la carta. Es una herramienta para poder ver la televisión y escuchar la radio en cualquier ordenador pero escogiendo exactamente lo que quieres ver u oir en cada momento. A tu gusto y según te venga bien.

Parecía un acto más al uso, con su presentador, su power point, sus discursos y sus autoridades: Ha estado el Lehendakari, el Director General de EiTB, su equipo, gentes de la tele, de otros medios y del sector audiovisual, en fin lo normal aunque tirando a bueno porque Alfredo Füldner ha puesto unos canapés de los suyos, llenos de imaginación y de arte , de esos que levantan cualquier acto.

Lo parecía pero no ha sido un acto normal. Ha sido una revolución, aunque no la vayamos a ver hasta que pase un tiempo y se vaya asentando. EiTB es líder absoluto en España en crecimiento de seguidores por internet con 1.200.000 visitantes en el último mes, lo que no está nada mal en un país de poco más de dos millones de habitantes. Está visto que los vascos apreciamos poder ver la televisión cada uno a nuestra bola (como otras cosas también) y esta plataforma presentada hoy, que enseguida se extenderá a telefonos móviles, nos va a permitir consumir los contenidos audiovisuales de EiTB que queramos en cualquier lugar del mundo, a cualquier hora. Se acabó el "que pena, me he perdido el programa...". A partir de hoy vas y lo miras en la web, entero hasta una semana después y a la hora que te de la gana, de día o de noche.

Esto, que parece una facilidad apreciable y conveniente es en realidad una transformación profunda y duradera de nuestra forma de consumir productos televisivos. Una más de las muchas transformaciones que nuestras televisiones públicas tienen que afrontar. EiTB ya lo ha hecho. Enhorabuena a todos los que lo han trabajado para que parezca tan fácil.

viernes, 10 de junio de 2011

No sabía yo que Berlín fuese parte del Tercer Mundo

Foto 5 Días

Cuando se habla de incrementar la competitividad casi siempre se entiende como que los trabajadores “deberían renunciar” a una parte de sus salarios, directos o indirectos, para que las empresas puedan así ofertar al mercado productos más baratos y más capaces de tener éxito en mercados muy exigentes que no distinguen el origen de los bienes que consumen ni les importa el sueldo de los trabajadores que los fabricaron.

Por su sencillez, se trata de una explicación muy competitiva ella misma en el mercado de las opiniones, al que también le gustan las más fáciles de entender, las que más baratas le resultan en esfuerzo.

Estos días hemos sabido que la factoría Mercedes de Vitoria se enfrenta a un dilema difícil y que debe rebajar los salarios y los precios de sus proveedores para poder competir dentro de la misma empresa por la fabricación de los próximos modelos de furgonetas de la marca. De no conseguirlo peligra el futuro de una compañía que genera el 3% del Producto Interior Bruto de Euskadi.

Todo esto parece que encajaría muy bien con la explicación tradicional antes citada, si no fuera porque la otra factoría con la que compite la de Vitoria está en Berlín. ¡Vaya por Dios! En el corazón del país más rico de Europa, el mismo que solemos poner como ejemplo por sus envidiables condiciones laborales.

No parece que esta vez el costo de los salarios sea el meollo. Y no será el único caso, probablemente.

Soy consciente de la proverbial solidez y firmeza que siempre tienen los prejuicios y los estereotipos pero no me resisto a señalar este caso porque nos abre una oportunidad estupenda para hacer un ejercicio de reflexión sobre cuáles son los elementos que verdaderamente hacen que una empresa sea más competitiva y cuál debe ser el equilibrio entre ellos.

Ahí van algunos de esos elementos:
  • · Los salarios (por supuesto)… pero también
  • · La calidad
  • · El diálogo entre empresas y trabajadores
  • · El diseño
  • · La responsabilidad social
  • · La innovación
  • · El compromiso de los trabajadores y de los inversores
  • · La imagen de marca
  • · En entorno industrial
  • · La captación y remuneración del talento
  • · La fortaleza de los controles públicos
  • · El respeto por el entorno
  • · La existencia de un sistema financiero eficaz
  • · La justicia social y la existencia de servicios que aseguren la estabilidad social
  • · Las infraestructuras públicas
  • · El respeto al medio ambiente
  • · Y ya puestos, lo diré también….La calidad de la democracia
Entiendo que usted y yo opinaremos diferente sobre la importancia y peso de cada uno de esos conceptos en la competitividad pero, sin duda todos ellos importan. El caso de Mercedes de Vitoria puede ser una buena ocasión de reflexionar sobre ello.

martes, 7 de junio de 2011

Lo malo de la anarquía es que necesita mucha organización


Lo que distingue a la democracia de otras formas de organización política no es la ausencia de autoridad sino el modo en que esa autoridad se adquiere y la existencia, además, de una forma reglada y controlada de ejercerla.
Foto "Público"

En democracia las formas son el fondo. Un gobernante democrático no puede hacer todo lo que le parezca, por muchos votos que tenga, ni puede sustraerse al control y al escrutinio público constante, sea por medio del Parlamento, de los medios de comunicación o de la libertad de expresión de los ciudadanos.

Todas las formas de gobierno son imperfectas, todas permiten el error o la maldad, pero lo que hace distinta (y mejor) a la democracia es que ésta se sabe imperfecta y se pone a sí misma controles. La democracia desconfía siempre de los gobernantes y de sí misma y apuesta por la inquietante estadística en lugar de por la tranquilizadora verdad. Por eso paga gustosa el precio de errar a veces a cambio de acertar a la larga. Prefiere, en definitiva, la inteligencia colectiva a la genialidad individual.

La democracia puede verse como lenta y engorrosa pero es un sistema para tomar decisiones, no para no tomarlas. A menudo nos distrae tanto el espectáculo que la acompaña: las elecciones, las campañas, las declaraciones, los acuerdos o desacuerdos parlamentarios, las mayorías y minorías, los pactos, las votaciones… que olvidamos que al finalizar todo eso se toman efectivamente unas decisiones y no otras. Porque la política, democrática o no, es tomar decisiones sobre la “res publica”, sobre los bienes y las reglas que nos afectan a todos y que nunca pueden ser, por definición, unánimes.

Me parece que no querer enfrentarse a esa incómoda evidencia es lo que está acabando con las interesantes protestas del 15M.