miércoles, 23 de noviembre de 2016
Los iluminados reivindican su inhumanidad
Lo que distingue a los iluminados de los ilustrados es la certeza. Mientras estos buscan la verdad en medio de un mundo que saben lleno de sombras, de ignorancias, de desconocimiento y lleno también de errores propios y ajenos, aquellos simplemente saben cómo son las cosas. No pierden su tiempo ni su esfuerzo en buscar la verdad puesto que ya la tienen y no necesitan buscar más.
Las explicaciones de los ilustrados tratan de elevarse desde la ignorancia para llegar al conocimiento y aún así siempre van cargadas de incómodas dudas. Nada que ver con los argumentos de los iluminados que descienden rápidos y ágiles desde LA VERDAD para adoctrinar sobre las miserias de una realidad que no tiene, ni puede tener, secretos para ellos.
Pero la certeza es un arma tan poderosa como exigente: no permite titubeos, no acepta el matiz, gusta de la simplicidad y exige fidelidad total. Si LA VERDAD es más valiosa que la propia vida de quienes la poseen no digamos de la de aquellos que, tercos, se niegan a abrazarla.
Los ideólogos de LA VERDAD no solo pueden sino que deben manifestarse inflexibles y no perder ni una sola ocasión de remarcar públicamente su valor auténtico, su fuerza y su frescura frente a los despreciables y blandos ignorantes que aún dudan, que aún creen legítimo el punto de vista del otro, que entienden sus motivos, sus debilidades o simplemente su humanidad.
Por eso, cuando fallece una persona que se sentaba a su lado, fuera cercana o adversaria, los imperfectos y titubeantes ilustrados manifiestan dolor, mientras los iluminados perfectos aprovechan para no hacerlo.
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5 comentarios:
(de El País): "En este sentido, el líder de Podemos ha señalado que su actitud es "compatible con la coherencia" por hacer una "separación de lo político y lo personal".
Si Pablo Iglesias puede "separar lo político de lo personal" es que, como bien dices, no es un ser humano. no es "zoon politikon" pues el vivir en comunidad política, con todo lo que conlleva de conflicto y de solidaridad, de pluralismo y de lucha, etc. es precisamente lo que nos hace humanos, es nuestra naturaleza. al menos, eso creía Aristóteles... tonterías de viejo casta... supongo.
Bravo Carlos, no sabía ponerle nombre a lo que soy, despreciable, blanda e ignorante, frente a la panda de iluminados que tengo alrededor
¡¡Perfecto Carlos, como siempre!!
http://www.elplural.com/politica/2016/11/23/alguien-recuerda-el-minuto-de-silencio-por-labordeta-no-se-celebro solo para que se tenga en cuenta...
Estas reacciones tras la muerte de alguien son de las que no se olvidan jamás... Y son de las que definen a las personas y a los colectivos.
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