domingo, 18 de diciembre de 2011

Candidato a premio al peor anuncio


Y ya puestos a hablar de anuncios he visto en un diario el peor anuncio en muchos años, y mira que los hay malos.

Hay personas que parecen creer que todo el “mundo mundial” piensa todo el rato y se preocupa por lo que ellas hacen, que su tarea es tan transcendente que nadie osará ignorarla jamás, que matrimonios y solteros nos levantamos cada mañana pensando en eso a lo que ellas se dedican y que no dormimos a gusto hasta no tener la información que nos facilitan, que devoramos -faltaría más- con lógica avidez.

El anuncio adjunto es una demostración de que estas gentes existen de verdad y que, imbuidos de tan onanista convencimiento, ni se les ocurre pensar que deban captar una atención con la que parecen convencidos de que ya cuentan de entrada -estaría bueno-.

No se rebajarán, no, a contratar a un profesional de la publicidad que les podría hacer ver -insultante- que no son el ombligo del mundo y que en consecuencia les recomendaría “humillarse” a tener que interesar y convencer a los lectores. Nada de eso ¡hasta ahí podíamos llegar!

Lo peor de todo es que el anuncio es de la Fundación Vasca para la Excelencia e “informa” de la entrega de Premio Vasco a la Calidad y Excelencia en la gestión (sic). Tela.

3 comentarios:

José Félix Ruiz dijo...

Que razón tienes, y encima habla de .."ir hacia una gestion avanzada en la calidad". Deberian saber que una pagina en prensa, cuesta mucho, pero cuesta lo mismo si pones un buen anuncio que si pones uno malo y no se les ha ocurrido pensar quede una forma rentabilizas mejor la inversión que de la otra Vaya ejemplo que nos dan de "inversión en calidad".

inakia dijo...

Yo creo que representa a Dios. La "Q" es el ojo divino y el triángulo la santísima trinidad. ¿qué recuerdos?

Anónimo dijo...

Me encanta que hayas encontrado esta prueba irrefutable de la inutilidad de este tipo de herramientas de gestión que para lo único que sirven es para ocultar la ineptitud de los líderes que las adoptan. Para eso lo hacen. Y sé de lo que hablo. La herramienta en sí no es que sea mala, pero sí lo es el mal uso que de ella se hace en la mayoría de los casos, al menos en nuestro país (vasco), incluidas agencias dedicadas a su promoción y supervisión, como es el caso.